Informe psicológico de Adolf Hitler

Nos guste o no Adolf Hitler fue uno de los personajes más importantes del siglo pasado. Su historia y su pensamiento darían para varias notas. Mucho se ha escrito y mucho se desconoce sobre esta "figura" que cambio la historia en las décadas de 1930 y 1940. 

Hoy hablaremos de un informe psicológico realizado por Joseph Mac Curdy, académico de la Universidad de Cambridge sobre la figura del dictador alemán. Este informe, escrito en 1942,  antes de que se conociera la existencia de campos de concentración, acaba de ser encontrado en la documentación de Mark Abrams, un analista de propaganda y guerra psicológica que trabajó para la BBC y quien encargara éste perfil.

Muchos psicólogos se han ocupado de analizar a este personaje. Hoy se sabe que el padre de Hitler (Alois) lo golpeaba de chico y que su madre  Klara Pölzl lo "endiosaba" ya que Adolf siendo el tercer hijo de ambos era el primero en sobrerivivir. El joven Hitler sintió desprecio por su padre y a la vez admiración por su carácter. Alois Hitler hijo, medio hermano de Adlof, también fue un hombre violento, que vivió en Irlanda, Inglaterra , Austria y Alemania. Abandonó a su familia y se casó (bígamo) en Alemania. Adolf sintió lo mismo por su madre, desprecio ya que no tenía carácter para contener a su padre y admiración porque ella fomento el amor de las artes y creyó en el.

En el informe británico, Mac Curdy analizó varios discursos del líder y en ellos entrevió el fracaso de la Operación Barbarroja,  invasión alemana a Rusia. "En su discursos se nota a un hombre que contempla seriamente la posibilidad de una derrota total. Ante el fracaso externo, Hitler se concentra en la percepción de un enemigo interno: los judíos. Ellos son la encarnación del mal mientras él es la encarnación del bien"  La "fobia" de Hitler hacia los judíos aumentaba a medida que la "marea se volvía contra los nazis".

Añade, "Él es un dios por cuyo sacrificio se puede obtener la victoria final sobre el mal. Hitler está atrapado en una telaraña de engaños religiosos", recordemos que Hitler si bien era católico se sentía atraído por la esotérico y ocultista, se cree que incluso fue iniciado en la masonería. Muchos de los símbolos nazis provenían de estas disciplinas.

Un pasaje interesante del informe dice: "los discursos de Hitler reflejan por un lado unas tendencias morbosas y, por otro, unos conocimientos especiales a su disposición".

Esas "tendencias morbosas" se sintetizan en  chamanismo, epilepsia y paranoia. El chamanismo se refiere a la histeria y compulsión de Hitler de alimentar a la multitud con su mensaje a medida que percibía el declive. La epilepsia, por su parte, "evidencia frialdad combinada con una tendencia a perder el corazón cuando no consigue sus ambiciones", detalla MacCurdy. La última y más preocupante tendencia, según el informe, es la paranoia que se refleja en el complejo mesiánico del líder nazi. "Hitler pensaba que estaba conduciendo a un pueblo elegido en una cruzada contra el mal encarnado en los judíos".

Hoy se sabe que unas semanas antes de que se escribiera el perfil, los nazis habían puesto en marcha la llamada "solución final", el exterminio de toda la población judía en Europa.

Si se hubiese sabido antes de 1939, muchas vidas se hubieran salvado. Los intereses del Reino Unido, Francia y EEUU de ayudar a este líder anticomunista para que fuera un freno al comunismo soviético prevalecieron. Por otro lado, la URSS también creyó beneficiarse de este imperio alemán con el cual acordaron la división de Polonia entre otros estados. Casualmente fueron estos cuatro países quienes terminaron combatiendo y derrotando a la Alemania nazi de Adolf Hitler.

Felipe Caorsi